CRM, herramienta de gestión de proyectos, plataforma de seguimiento de tiempos, cuadro de mando financiero, mensajería de equipo, software de facturación, herramienta de RRHH…
Si tiene la impresión de que su stack de software se parece a una sala de máquinas mal cableada… no está solo.
En muchas agencias, la tecnología se ha convertido en un milhojas costoso, que consume tiempo y francamente poco eficiente. Lo que debía simplificar la gestión se ha convertido en un quebradero de cabeza diario.
Entonces, ¿cómo salir de esta trampa del sobreequipamiento? Y sobre todo, ¿cómo construir un ecosistema tecnológico que realmente apoye el rendimiento de su agencia?
Demasiadas herramientas = sin visión global
Cada herramienta está destinada a resolver un problema específico. Pero a fuerza de apilar soluciones, crea nuevos problemas:
- Datos dispersos, incluso contradictorios,
- Duplicación de tareas (entrada múltiple, exportaciones manuales…),
- Costes de software que se disparan,
- Fatiga digital en los equipos,
- Y sobre todo: imposible tener una visión clara y en tiempo real de su actividad.
Resultado: pierde tiempo, dinero… y su dirección se vuelve confusa.
Lo que se olvida demasiado a menudo: la coherencia antes que la cantidad
No es el número de herramientas lo que hace el rendimiento, es su capacidad para trabajar juntas. Y sobre todo, para ofrecerle una visión de conjunto fiable y explotable.
Un ecosistema tecnológico sano es:
- Herramientas conectadas entre sí, sin reintroducción de datos
- Procesos centralizados y alineados con sus necesidades empresariales
- Una gestión fluida, en tiempo real, en toda la cadena (de la venta a la facturación)
Y si una sola herramienta puede cubrir todo el ciclo de vida de sus proyectos, sin fricciones… ¿por qué privarse?
¿Cómo evitar (o corregir) la trampa del sobreequipamiento?
Aquí tiene 5 buenas prácticas concretas para poner orden en su stack:
1. Mapee sus usos actuales
Enumere las herramientas implementadas, su coste, su uso real y las duplicaciones. Muy a menudo, ciertas herramientas apenas se utilizan… pero se siguen pagando.
2. Evalúe el valor añadido de cada herramienta
Hágase la pregunta: ¿esta herramienta me hace ganar tiempo, mejorar la calidad o aumentar mis márgenes? Si no es el caso, quizás sea hora de cuestionarla.
3. Busque centralizar, no apilar
Opte por una solución que cubra el máximo de sus necesidades en un entorno único. Menos conexiones, menos errores, más eficiencia.
4. Implique a los equipos en la elección de las herramientas
Son ellos quienes las utilizan a diario. Si la herramienta es compleja o está mal integrada, pronto será evitada, y sus datos se volverán poco fiables.
5. Dirija con una sola fuente de verdad
Todos sus datos operacionales (tiempos, proyectos, presupuestos, facturación…) deben estar conectados y accesibles en una misma herramienta. Si no, sus decisiones estratégicas se basan en datos deficientes.
Furious: un ERP sectorial, no un apilamiento de software
Furious no es una herramienta más que añadir a su pila. Es la columna vertebral de su agencia.
Todo está centralizado, conectado y automatizado: CRM, staffing, gestión de proyectos, finanzas, seguimiento de tiempos, reporting…
Y sobre todo, todo está pensado para ayudarle a dirigir en tiempo real, con indicadores claros y explotables.
- Se acabaron los idas y venidas entre seis interfaces.
- Se acabaron las exportaciones cruzadas.
- Se acabaron las decisiones tomadas con 3 semanas de retraso.
Una sola herramienta. Cero fricción. Máximo impacto.